AUTORIDAD

  •  La Congregación tiene como fin especial sostener la autoridad de la Santa Sede, doquiera que se encuentre y dondequiera que trabaje. (XVIII, 487).
  •  Recomendamos siempre la obediencia a la autoridad civil, porque quien gobierna está puesto por Dios para mandar. (II, 450).
  •  Respetad todas las autoridades constituidas como ciudadanos, pero como católicos depended del Sumo Pontífice. (IX, 417).
  •  La religión Católica es el fundamento de la prosperidad en los estados, porque los súbditos no serán fieles a la autoridad civil si no son fieles primero a Dios. (IX, 443).
  •  Mi mejor consejo es éste: examinar de un modo práctico cómo dar al César lo que es del César, para que al mismo tiempo se dé a Dios lo que pertenece a Dios. (XIII, 288).
  •  Cuando surja alguna dificultad con la autoridad temporal o eclesiástica, procurad presentaros a explicar la razón de vuestro La exposición personal de vuestras intenciones disminuye bastante y posiblemente desvanece el juicio que alguna mentalidad pudiera haberse formado de vosotros. (XVII, 270).