CASTIDAD

  • Lo que debe distinguirnos de los demás, lo que debe ser la característica de nuestra Congregación es la virtud de la castidad. (XII, 224).
  • La castidad será el mejor triunfo de la Congregación y la forma más patente de agradecer a Dios tantos favores que nos ha concedido. (XII, 225).
  • Si alguno moralmente no está seguro de poder conservar la castidad, por caridad, no intente hacerse sacerdote ni religioso. (XI, 574).
  • Vino y castidad no pueden estar juntos. (IV, 184).
  • Humildad, obediencia, castidad, serán siempre agradables a María Santísima. (VIII, 131).
  • La virtud sobresaliente de los Salesianos debe ser la Castidad; así como los hijos de San Francisco de Asís se distinguen por su pobreza, y los hijos de San Ignacio sobresalen por la obediencia. (SM. 183).
  • Medios positivos para conservar la castidad: oración, evitar el ocio, frecuentar los Santos Sacramentos y ser cuidadoso en las cosas pequeñas. (IX, 708).
  • Medios negativos para conservar la castidad: huir de las ocasiones. (IX, 709).
  • Gula y castidad y especialmente vino y castidad, nunca pueden armonizar en una persona. (XI, 517).
  • Estad seguros que seréis bendecidos del Señor si conserváis la bella virtud, y huís de todas las cosas contrarias a la castidad. (XI, 522).
  • Mientras uno no pueda estar moralmente seguro de conservar la castidad – que es el fundamento y base de las otras virtudes- , yo no le aconsejaría que siguiera adelante en la vocación. (XI, 574).
  • La castidad es, según mi parecer, la base de todas las virtudes, que debe servir como fundamento básico de un edificio religioso. (XI,580).
  • La bella virtud de la castidad es el centro de las demás virtudes. (XII, 15).
  • La ocupación constante es el medio más eficaz para conservar la castidad. (XII, 16).
  • La mortificación de los sentidos nos ayuda a conservar la castidad y a fortificar el espíritu. (XII, 15).
  • En los tiempos actuales, es necesario contar con una modestia a toda prueba y con una castidad firme. (XII, 224).
  • La castidad es la reina de las virtudes, la virtud que conserva las demás. (XII, 470).
  • Quisiera emplear días enteros para hablaros solamente de la castidad. (XII, 564).
  • La castidad perfecta asegura la victoria sobre todos los vicios. (XII, 626).