CONFIANZA

  • Haz el bien sin esperar agradecimiento de nadie, sino de Dios únicamente. (VII, 418).
  • Insisto, que hay que tener necesidad de tener suma confianza con los superiores en asuntos del alma; es la llave de la paz interior, el arma más eficaz para ahuyentar la melancolía, el secreto para encontrar la certeza y la satisfacción tanto en la vida como en la muerte, y para alcanzar la perfección cristiana. (IV, 554).
  • Dios permite las tribulaciones, para sacar mayor bien y mostrar su misericordia y poder. (VII, 461).
  • Os comunico un secreto que puede haceros mucho bien: abrid vuestro corazón al superior, depositad en él vuestra confianza y sed escuetamente sinceros. (XI, 263).
  • No se deben aceptar a los aspirantes al estado eclesiástico, si no dangarantía de una moralidad  a  toda  prueba,  o mientras  no  se  dejen  conocer  lo suficiente y no tengan confianza en los superiores. (XI, 269).
  • Mirad, hay ciertos individuos que son herméticos: no hablan, no abren nunca su corazón al superior; guardan siempre en suinterior sus Estad atentos: «latet anguis in herba». Son un verdadero flagelo, verdadera pesadilla para la congregación. (XII, 468).
  • De la familiaridad nace el afecto, el afecto lleva a la confianza; ésta abre los corazones de los jóvenes que manifiestan todo a sus maestros, a los asistentes y a los superiores. Serán sinceros en todo, estarán dispuestos para todo si se dan cuenta que son amados. (XVII, 108)